21.000 motivos para estar contenta

Captura de pantalla 2014-12-30 a las 17.45.05Cuando empecé este blog, allá por junio de 2011, no tenía ni idea de bloguear. De escribir algo más, llevo tiempo practicando y ganándome la vida con ello. Tenía Facebook, aunque no lo utilizaba demasiado. Y era una absoluta novata en un recién estrenado Twitter. Nunca he realizado un plan de marketing para mi blog, por dos motivos: porque me gusta la libertad de escribir lo que quiero y cuando quiero (sin presiones por alcanzar más o menos audiencia) y porque no siempre consigo el tiempo necesario para cumplir unos objetivos altos de redacción de entradas.

Eso hace que me sienta especialmente contenta por cada nueva persona que sigue mis artículos en Literatura y más, por cada visita, por cada modesto récord personal. En 2012, con 35 entradas escritas, tuve 6.800 visitas. En 2013, con siete entradas menos, mis post se leyeron 5.800 veces. Y en 2014, con 25 artículos nuevos, he conseguido ¡21.000 visitas! ¿Que puedo decir? Que estoy muy contenta y que gracias a todos: a los más fieles, a los que aterrizáis por casualidad y os quedáis un ratito, a los que comentáis, a los que os da pereza y guardáis vuestra opinión y, por supuesto, a los que compartís.

Hace poco, pensaba en 2014 y el balance no me salía muy positivo (excepto cuando lo limitaba al ámbito de la gente a la que quiero, ya que, por fortuna, ellos siempre están ahí y lo arreglan casi todo). Pero repasando las entradas del blog, recordé que sí me habían pasado cosas buenas, pero la memoria es frágil. Por ejemplo, quedé finalista en dos categorías de los premios TMB de Sant Jordi. Y ahora estos buenos resultados de mi blog de los que no era consciente. Da ánimos, ganas de seguir haciendo lo que me gusta y con lo que disfruto. Sin esperar reconocimiento, pero sin dejar de aspirar a conseguirlo (¿por qué no?).

Así que una vez hechas las paces con 2014, vamos a por el siguiente año. ¡Feliz 2015 a todos!

Mi blog ya no es un bebé

blog-92132_640Dicen que al cumplir tres años los humanos pasan de ser considerados bebés a ganarse el apelativo de niños. El pasado 15 de junio, Literatura y más entró en la niñez. Fue el momento en el que, perdido para siempre mi acceso a mi anterior blog (de la plataforma Blogger), reviví éste, que nunca había llegado a utilizar y lo nutrí con alguna entrada vieja para no comenzar de cero. La primera que rescaté fue sobre Javier Marías y las firmas el día de Sant Jordi.

Este blog no tiene más pretensión que la de que su dueña no desconecte del todo de la escritura. Aunque siempre dedido un rato a colocar etiquetas a los posts (es decir, busco mejorar el SEO) y a compartirlo, elijo los temas de un modo anárquico, y sé que no persevero tanto como para que sea un blog de lectura masiva (tampoco creo que este cajón de sastre, donde se habla de niños, de relaciones interpersonales, de leer y escribir, de política… pueda atraer a todos los públicos; ni sé si lo merece).

Aún así, las más de 20.000 vistas que ha conseguido en este tiempo me hacen sentir orgullosa y contenta. Me han leído sobre todo desde España, pero también mucha gente de México, Argentina, Colombia, Estados Unidos… Incluso algún despistado de Moldavia, Haití, Corea, India, Macao… Me acerco a los 250 comentarios. Me siguen, sumando seguidores directos y personas que siguen el blog a través de alguna de mis redes sociales, más de 2.200 lectores.

Algunas de las entradas que más han gustado son la que dediqué a Nelson Mandela, la de la versión de Richard Cheese de la canción Creep que suena en A vivir que son dos días, la entrada sobre mi inexistente crisis de los 40, o aquella en la que recordaba mi entrevista al escritor Pere Calders. Hoy he batido mi propio récord de visitas en un día, con más de 150. Alguna entrada, como la que hablaba sobre la experiencia de ser finalista en los premios TMB de este año, ha sido compartida más de 100 veces (¡gracias!).

Así que sí, mientras alguien se pase por Literatura y más de vez en cuando, voy a seguir dando la tabarra. Queda dicho : )

Nominada al ‘Seven things about me award’

7Cuando empecé a escribir este blog quería centrarlo en mi gran pasión: la literatura. Después he descubierto que mis pasiones son más, y he escrito sobre muchas otras cosas. De tanto en tanto, alguien se toma la molestia de dejar un comentario. Los agradezco todos, pero me hace especial ilusión cuando el autor es alguien a quien no conozco. Que lleguen hasta aquí desde cualquier parte del mundo me sigue pareciendo cosa de magia.
Adriana Citlali fue una de esas personas que apareció un día en mi blog y comentó. Ahora, ha tenido la amabilidad de nominarme a los «Seven things about me» award (en español). No sé demasiado sobre este premio, pero me parece una buena oportunidad de conocer a otros bloggers y de hacer saber a los que te gustan que les lees. Así que, Adriana, ¡muchas gracias!
Cuando te nominan, has de seguir tres pasos: dar las gracias al bloguero que te nominó; desvelar a tus lectores siete cosas sobre ti; nominar a otros blogueros que consideres merecedores del premio y comunicárselo en sus blogs. Primer punto, cumplido, vamos con el segundo, siete cosas sobre mí:

1. No me gusta hablar sobre mí.

2. Cuando en la escuela me hicieron la revisión médica de los 11 años, era de las más altas de mi clase. Cuando me la volvieron a hacer a los 13, era de las más bajas. Todo el mundo sabía ya que iba a ser bajita y yo me enteré cuando me lo dijo el médico. Conclusión: De casi todos los cambios importantes que sufrimos a lo largo de nuestra vida se enteran antes los demás que nosotros mismos.

3. Estoy segura de tener una doble en algún sitio, pues periódicamente alguien me habla de ella. Mi doble, si lees esto, manifiéstate. Igual podríamos hacer buenas migas.

4. Una de las cosas que más me costó en la adolescencia fue aprender a mantenerme firme en el «no, gracias».

5. Otra que no llevé bien hasta la edad adulta fue aceptar que había gente a la que no le caía bien. Ahora ya lo tengo asumido. A ti que lees esto, ¿te caigo bien, verdad? ¿a que sí? Dime que sí…

6. Valoro mucho la sinceridad, pero si tienes pensado ser ofensivamente sincero conmigo, valoraré aún más que eches mano de tu diplomacia. Yo prometo hacer lo propio contigo.

7. Estoy muy orgullosa de mi buen ojo para escoger amigos, de la familia que me ha tocado en suerte (aunque eso no es mérito mío) y de mi hija (en eso también han intervenido el azar y la buena interacción entre mis genes y los de su padre).

Ahora nomino a otros blogueros:

– A mi «nominadora», Adriana Citlali por su blog El alebrije y la salamandra, en el que trata frecuentemente cuestiones de género desde una perspectiva a la que me siento muy cercana.

– Al blog de Don Gerardo de Suecia, un maestro sueco de español que, aunque ya está jubilado sigue practicando el idioma (y poniéndolo al alcance de compatriotas que lo estudian) con divertidas anécdotas. Siempre me arranca una sonrisa.

– Al blog La amena biblioteca de Redfield Hall, por el cuidado con que están escritos cada uno de sus posts. No sólo te descubre autores, anécdotas, novedades… La lectura del blog es un placer en sí misma.

Ahora voy a anunciarles su nominación : )