Frases de niños (Lo que aprendo de Sara, VIII)

igualdad-hombres-mujeres-okMi hija ha nacido feminista. En el mejor sentido de la palabra (el único, de hecho; aunque haya quien quiera pervertirlo: ser feminista es creer en la igualdad de derechos y oportunidades para hombres y mujeres). Veíamos en la televisión la noticia de los actos de proclamación de los nuevos reyes de Holanda. Aparece la princesa Masako y comentan que hace 10 años que padece depresión. Comento con Juan quee uno de los motivos es la presión que sufrió por tener una hija y no un hijo. Sara me mira con los ojos muy abiertos y me pregunta por qué eso es un problema. Le digo que hay muchos lugares aún en los que se considera que un hombre vale más que una mujer. Y me contesta que eso es una tontería: «Además, mamá, si no hubiese chicas, no hubiera nacido nadie». Su padre le puntualiza que los hombres también son necesarios (obviamente), pero me gusta (lo reconozco) que tenga tan claro que postergar a las mujeres es cerrar las ojos a muchas cosas. Entre otras, a nuestra capacidad de dar vida.

Y también me gusta que encaje con absoluta normalidad muchas más cosas. Seguimos viendo el telediario y dan la noticia de que el jugador de la NBA, Jason Collins, ha declarado que es homosexual. Le cuento que hay hombres a los que no les gustan las mujeres, sino otros hombres. Y mujeres que se enamoran de mujeres. Y me contesta, en plan, mamá, que ya… «Ya me lo explicaste, lo sé». A veces no soy consciente del montón de cosas que ya sabe y comprende aunque solo tenga 6 años. Otro ejemplo. Hace unos días, aparece en las noticias un torero. Conversación con Sara:

– Mama, ¿por qué lo que lleva el torero es rosa y amarillo?

– ¿El capote? Sirve para llamar al toro, y suele ser de esos colores.

– Pero por qué, si el toro sólo ve en blanco y negro.

– … ¿Y tú cómo sabes eso?

– Me lo dijo alguien de esta familia (¿?) y como no tengo memoria de pez, me acuerdo.

Como esto siga así, voy a tener que pedirle una lista de los temas de los que va a querer hablar y preparármelos para no quedar mal con la renacuaja de 6 años, que dentro de poco me va dar sopa con ondas ; – )

8 de marzo, Día de la Mujer Trabajadora

Contenta de ser mujer y de ser mujer trabajadora. Y harta de que cada año por estas fechas se publiquen las mismas estadísticas y porcentajes, punto arriba, punto abajo: que cobramos menos por hacer lo mismo, que no alcanzamos los puestos de dirección pese a estar igual o mejor formadas que los hombres que sí lo hacen… Por no hablar de la lacra de la violencia de género; o del machismo latente en algunos hombres (todavía demasiados) que (por la boca muere el pez…) les lleva a decir sandeces. Y lo peor es que algunos de esos hombres ostentan altas responsabilidades (estoy pensando en algunas decisiones judiciales, en ciertas legislaciones, etc.).

Señores, sacúdanse el machismo de encima. No es bueno para nosotras, pero tampoco para vosotros. Si las mujeres avanzan, la sociedad (todos) también. Cambiar inercias cuesta, requiere un esfuerzo. Pero las recompensas merecen la pena. Hay muchos estudios que demuestran que las sociedades que promueven la igualdad funcionan mejor a todos los niveles (a parte de ser más justas, que tampoco es una cuestión baladí). Quizás os sea más fácil si dejáis de pensar en abstracto: ‘las mujeres’ no son un ente indefinido (y mucho menos ‘el enemigo’). Son vuestras madres, vuestras parejas, vuestras hermanas, hijas, amigas… A ver si entre todos cambiamos la estadística y rompemos algún que otro techo de cristal (simbólicamente, claro).

PTA.: Hay honrosas excepciones. Así que quien ya se esté aplicando el cuento, que no se dé por aludido. Yo conozco a algunos : – )